Hoy me ha preguntado el primo de mi vecino (no va segunda intención…) que si había algún modo para tratar de conseguir que las pérdidas haciendo trading y operando en los mercados, nos afectaran lo menos posible…
A menudo cometemos el error, en la vida y en el trading, de pensar que todo tiene que ser siempre del mismo color (blanco o negro, verde o rojo), y todo nuestro transcurrir tiene ser siempre plácido y dichoso, o continuamente negativo y desgraciado, o que la tendencia de los mercados va a ser siempre bajista, o siempre alcista.
Y además, pensamos que en nuestro deambular en el día a día o en el devenir de los mercados, todo tiene que moverse o avanzar en una línea continua, en una verticalidad interminable en la que nunca puede haber el menor paso atrás…
Pero ni la vida ni el trading son así. Por muy bien que nos vayan las cosas, puede llegar una mala noticia que empañe nuestra alegría, por muy alcista o bajista que esté el mercado siempre se producirá un retroceso, y ambas cosas,tanto los momentos de tristeza en la vida como los pasos atrás en los impulsos del mercado, deben servirnos para detenernos a respirar, a tomar aún más fuerza y tranquilizarnos pensando que estamos en la buena dirección…
Tienen que valer no para pensar que todo nos va a ir mal a partir de ahora, o que el mercado se ha girado de golpe y tenemos que hacer un “reverse” en nuestra posición y darnos la vuelta rápidamente.
Haríamos mal en pensar en lo peor solamente porque algo interrumpa nuestra paz o felicidad vital, o porque suframos una serie de stops seguidos, o tengamos que aguantar una serie de operaciones perdedoras, o porque un aparente pequeño retroceso se interponga en el sentido de nuestra posición.